Después del ataque terrorista en el Crocus City Hall, Rusia ha prometido justicia y venganza por las más de 133 vidas perdidas en el tiroteo del concierto de Piknik. Dmitri Medvédev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, declaró que todos los responsables serán considerados objetivos legítimos sin importar su origen o estatus. “Nadie quedará impune”, subrayó.
En Telegram, Medvédev envió un mensaje este domingo, escribió: “Nos vengaremos por todos. Y todos los implicados, independientemente de su país de origen o estatus, son a partir de ahora nuestro objetivo legal y principal. Espérennos, bastardos”, escribió este domingo en su cuenta de Telegram.
El ataque, que se describió como un acto de “terrorismo salvaje” por el presidente Vladímir Putin, ocurrió durante un concierto en el Crocus City Hall. Hombres armados ingresaron al lugar y comenzaron a disparar indiscriminadamente contra la multitud. Además de los disparos, los presuntos responsables también utilizaron un líquido inflamable para provocar un incendio.
El último saldo reportado informa de al menos 133 personas muertas y más de 150 heridas. Las escenas difundidas en redes sociales muestran desde los disparos contra civiles hasta los trabajos de los servicios de emergencia que luchaban por salvar vidas y controlar las llamas en el Crocus City Hall.
Putin, en un discurso televisado, prometió que los culpables enfrentarán un destino acorde a sus acciones. Declaró un día de luto nacional en honor a las víctimas y reafirmó el compromiso de Rusia de combatir el terrorismo en todas sus formas.
“Los cuatro perpetradores del acto terrorista que dispararon y mataron a personas han sido detenidos. Viajaban hacia Ucrania… Identificaremos y castigaremos a todos los que estuvieron detrás de los terroristas, que prepararon el ataque“, expresó Putin.
