Habrá que esperar hasta el domingo 3 de septiembre para que de manera oficial se conozca que Xóchitl Gálvez será la abanderada del Frente Amplio por México para encabezar el movimiento político que en el 2024 participará en el proceso electoral con la intensión de ganar la presidencia de la república…?
Luego que el día de ayer miércoles 30 de agosto el presidente nacional del PRI Alejandro Moreno, acompañado de la cúpula mayor del priismo diera a conocer que el partido tricolor apoyará de forma incondicional a la senadora Xóchitl Gálvez como candidata del FAM, reconociendo que el resultado en las mediciones realizadas, hasta ayer mismo, no eran favorables para la senadora priista Beatriz Paredes, y anticipándose a la fecha definitiva marcada en el reglamento del proceso interno, que es el domingo 3 en que se realizaría la segunda parte de la consulta ciudadana, dio por sentado que la representante del PAN es la ganadora, ya que la diferencia de 15 puntos porcentuales es inalcanzable.
Si somos observadores, la mayoría de los presentes en esa declaración de “Alito” mostraron rostros serios, expresiones de enojo y de frustración, al haberse adelantado “su líder” a darse por derrotados, sin siquiera estar presente ninguna de las dos contendientes, ni directivos de los otros partidos, lo que se consideró una falta de respeto y de honorabilidad por parte del chiapaneco.
Horas mas tarde, la señora Beatriz Paredes salió a dar una declaración en la que tácitamente aceptaba el triunfo de Xóchitl Gálvez, sin mencionar si esperará a que el proceso de consulta programado para el domingo se lleve a cabo.
Hay quienes aseguran que este “movimiento” de Alito Moreno es una jugarreta para haber negociado algunas canonjías y asegurarse tranquilidad en su vida futura, ya que este movimiento causa confusión y enojo en la base priista que bien pudiera no participar en el proceso electoral y dejar a su suerte a Xóchitl.
La incógnita hasta este día es si tiene o no caso realizar el ejercicio del próximo domingo, y ratificar el triunfo de la panista, y aunque Paredes resultase ganadora, no tendría los puntos necesarios para revertir el resultado que se tiene hasta hoy; los que conocen de política dicen que, con este panorama, prácticamente se le está dejando el campo abierto a MORENA para ganar en el 2024.
Por otro lado, en la “casa guinda” no las traen todas fichas acomodadas, Marcelo Ebrard sigue mostrando inconformidad con la forma en que se está llevando el proceso, vuelve a asegurar que, desde la Secretaría del Bienestar, están apoyando con todo a Claudia Sheimbaum, aplicando recursos económicos y humanos para hacer trabajo en favor de la corcholata favorita de palacio, lo que bien pudiera ser aprovechado por los “otros” para hacer su campaña.
Por último, se asegura que el discurso cotidiano mañanero de echarle la culpa a todos de las penurias que se viven en el país, ya no da resultado y que el huésped de palacio ha perdido puntos de aceptación y que esto influirá en el ánimo de los ciudadanos que todavía creen en el proyecto de la 4T.