Los jesuitas dijeron que ya no contaban con el número de sacerdotes suficientes para continuar con las celebraciones litúrgicas en dicho recinto religioso.
Apenas en agosto pasado, la orden de los carmelitas descalzos anunció que, tras más de cuatro siglos de presencia en el sur de la Ciudad de México, dejará en octubre próximo el templo de Nuestra Señora del Carmen en San Ángel, debido a la disminución de vocaciones religiosas.
La Arquidiócesis Primada de México se hará cargo ahora de la emblemática iglesia colonial, la cual apenas está separada por un gran cristal del Museo del Carmen, siglos atrás monasterio de los carmelitas, expropiado durante la Revolución Mexicana.
Por ejemplo, los jesuitas en México, una de las órdenes más numerosas, cuenta con 250 sacerdotes, mientras los paulinos, de la Sociedad de San Pablo, no alcanzan ya a tener 60 presbíteros.
Los casi 60 paulinos de México, a los que ahora se suman aproximadamente otros 20 de Estados Unidos, muestran una congregación en agonía que, si sobrevive, es de puro milagro gracias a la intercesión de don Alberione”, apuntó en un artículo editorial en marzo de este año el Centro Católico Multimedial (CCM), que dirige el sacerdote paulino, Omar Sotelo.
De acuerdo con el sitio global Catholic Hierarchy, el cual recaba las estadísticas oficiales de la Iglesia, a nivel mundial en el último medio siglo, los sacerdotes católicos provenientes de órdenes religiosas han disminuido en promedio, 37%, y en algunas en más de 50%, de forma mucho más vertiginosa que los presbíteros formados en seminarios de las diócesis.
Entre las órdenes que han resentido más la baja en el número de sacerdotes están las más reconocidas, entre ellas, los jesuitas, los franciscanos, los agustinos, los benedictinos y los capuchinos, mientras que otras han resentido menos este descenso, como los salesianos y los carmelitas descalzos.
Tal es el caso de la iglesia de la Inmaculada Concepción, ubicada en el cruce de Salto del Agua, en Izazaga y Eje Central, en la Ciudad de México, a cargo de la Fraternidad Sacerdotal San Pedro (FSSP), la única orden religiosa en la capital que oficia la misa en latín, la Misa Tridentina.
Si en algún momento los dos o tres presbíteros de la FSSP dejan esta parroquia, el rito de la antigua misa romana, según los libros litúrgicos latinos de 1962, desaparecerá en esta gran urbe.
A LA BAJA EN EL MUNDO
Con datos del sitio global Catholic Hierarchy, creado por el informático estadunidense David M. Cheney, a nivel mundial las órdenes religiosas católicas y su número de sacerdotes han tenido en el último medio siglo un descenso inmenso.
Las cifras recopiladas desde 1966 hasta 2024, indican que las doce principales órdenes religiosas masculinas por su número de sacerdotes casi todas están en la misma tesitura, es decir a la baja, excepto los carmelitas descalzos que incrementaron en seis sacerdotes de 2015 a 2024.
AUMENTAN LOS REGISTROS DE ASOCIACIONES RELIGIOSAS
En sólo nueve meses, 212 nuevas asociaciones religiosas obtuvieron su registro constitutivo por parte de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Así lo indica el Primer Informe de Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, el cual destaca que la cifra, que abarca de octubre de 2024 a junio pasado, representa un incremento de 12% respecto a los otorgados el año anterior.
El reporte más reciente de la Segob, de julio de 2022, detalla que hay más de 9 mil asociaciones religiosas en todo el país.
Según el Panorama de las religiones en México, publicado por el Inegi, a partir del censo de 2020, 97.8 millones de mexicanos se identificaban como católicos, mientras que 14 como protestantes o cristianos evangélicos, los grupos religiosos más numerosos en el país.
Casi 58 mil 876 mil profesan el judaísmo; 7 mil 982, el islam; 29 mil 985 religiones de origen oriental; 33 mil 372, creencias de raíces étnicas; 40 mil 799 de raíces afro; 36 mil 764 son espiritualistas y 40 mil 391 más practican otras religiones.
En tanto, 10.2 millones se declaran sin religión y 3.1 millones más, sin adscripción religiosa, pero creyentes.



